LAS NORMAS DE HIGIENE EN LA COCINA: UN ESFUERZO QUE VALE LA PENA

La cocina es el punto de encuentro de la casa: en ella se cocina, se disfruta de las comidas en familia y se comparten momentos con familiares y amigos. Pero también es una fuente de proliferación de todo tipo de gérmenes. Para evitar infecciones de menor o mayor gravedad, hay una serie de normas de higiene básicas en la cocina que conviene interiorizar y aplicar regularmente. Llevando a cabo unos hábitos saludables, lograrás mantener tus utensilios de cocina y las mesas de en las que cocinas libres de gérmenes y bacterias.

Desde el campo en el que se cultivan los alimentos hasta llegar a tu despensa y al plato, pasando por el camión que los transporta y el supermercado, recorren un largo camino en el que entran en contacto con distintos tipos de gérmenes y bacterias. Aun siendo inevitable, conviene recordar que las bacterias, los hongos, los virus y los parásitos no solo sientan mal, sino que pueden desencadenar toxinfecciones de diversa gravedad. La compra de alimentos frescos y su correcto almacenamiento son dos factores muy relevantes en el contexto de la conservación de los alimentos.

El Ministerio de Sanidad y Consumo promueve la seguridad alimentaria a través de la AESAN con la publicación de material informativo y divulgativo.

NORMAS DE SEGURIDAD E HIGIENE EN LA COCINA

Las normas de higiene reducen las oportunidades de proliferación de los gérmenes en las cocinas e impiden que entren en contacto con los platos y pasen de una persona a otra. La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición¹ y la OMS² recomiendan estas normas de higiene en la cocina:

Superficies y utensilios siempre limpios: los electrodomésticos, los cubiertos, la vajilla, las tablas de cortar y las mesas en las que se va a cocinar se han de limpiar después de cada uso.

Lavar con agua potable: al lavar los platos a mano, es mejor hacerlo con agua potable caliente y detergente para platos. El lavavajillas alcanza temperaturas aún mejores que superan los 60 °C.

Material de limpieza: las bayetas y esponjas se han de cambiar con periodicidad, puesto que la humedad facilita la proliferación de bacterias.

Trapos de cocina: los trapos deben lavarse en la lavadora a 60 °C y cambiarse siempre que sea necesario, incluso varias veces en un día. Los restos de carne cruda, en cambio, ya que pueden contener microorganismos bacterianos, deben limpiarse con papel de cocina de un solo uso.

Basura: como en el cubo de la basura se acumulan todos los restos alimentarios, debería cerrarse con tapa y poder lavarse con regularidad. Los restos orgánicos no deben acumularse en casa.

Nevera: las bajas temperaturas tampoco reducen los microorganismos dañinos, por eso también debemos preocuparnos de la higiene del frigorífico. Si aparece moho, se ha de tratar de inmediato.

Mascotas y animales: las mascotas no deberían entrar en la cocina. Asimismo, controla regularmente si en tu cocina hay insectos, ratones o cualquier otro portador de gérmenes y bacterias, debido a que se pueden sentir atraídos por los alimentos, e instalarse incluso en las cocinas más limpias.

Lavarse las manos con regularidad: ya sea después de pasar el trapo por la encimera o tras llenar el lavavajillas, las manos se han de lavar siempre a conciencia después de cada tarea en la cocina.

Cocina siempre limpia: los gérmenes también se instalan en los mandos de los fogones, en las puertas de las neveras o en las puertas de los armarios, así como en los grifos, lavavajillas, cajones, botes de cristal o interruptores de la luz.

Consejo GROHE: los grifos monomando son más higiénicos que los tradicionales, pero aún más seguros son los grifos con sensor de infrarrojos, puesto que se activan sin necesidad de contacto. En nuestro catálogo encontrarás una selección de estos grifos tan higiénicos y que necesitan muy poco mantenimiento.

List of sources:

¹ AESAN, Recomendaciones alimentarias: http://www.aecosan.msssi.gob.es/AECOSAN/web/para_el_consumidor/seccion/recomendaciones.htm
² OMS, Cinco claves para la conservación de los alimentos: https://www.who.int/foodsafety/publications/consumer/en/5kys_Spanish.pdf?ua=1

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