EL NIVEL ADECUADO DE HIGIENE EN EL HOGAR

La higiene en el hogar es fundamental. Sin embargo, no todas las medidas son eficaces. En circunstancias normales, basta con utilizar productos de limpieza convencionales. Según el Centro Federal de Educación para la Salud alemán (BZgA), estos productos de limpieza eliminan más del 90 por ciento de los gérmenes de una superficie que se haya limpiado con estos.

MEDIDAS EFECTIVAS DE HIGIENE PARA EL HOGAR

Existen medidas que dificultan la presencia de gérmenes en el hogar. Además de una limpieza a fondo, también es importante una limpieza y una ventilación adecuadas. El Centro Federal de Educación para la Salud alemán (BZgA) recomienda las siguientes prácticas para mantener la higiene en el hogar.

LIMPIEZA GENERAL

Los gérmenes se producen en todo el hogar. En la cocina, por ejemplo, es el lugar en el que pueden proliferar más microorganismos. Normalmente hay más gérmenes en el fregadero que en el propio baño. Por lo tanto, la limpieza de la cocina y de los alimentos es muy importante para prevenir enfermedades. Para prevenir la propagación de patógenos y mejorar la higiene en el hogar, los expertos aconsejan lo siguiente: lavar los platos, cubiertos y utensilios de cocina con agua caliente y detergente. También se pueden lavar los platos a fondo con un lavavajillas, programando una temperatura de lavado de al menos 60 grados.

UN LAVADO CORRECTO

En la ropa además de las manchas visibles, también juegan un papel importante las manchas invisibles. Para eliminar estas manchas, es crucial la temperatura del agua y el detergente. Los textiles que se utilizan para la higiene personal o que entran en contacto directo con la piel, (por ejemplo, la ropa interior, las toallas, la ropa de cama, etc), se deben lavar a una temperatura de al menos 60 grados. El resto de prendas pueden lavarse a temperaturas más bajas. Los expertos en higiene, también recomiendan el uso de detergentes sólidos o detergentes multiusos, porque contienen componentes blanqueadores que limpian a fondo a una temperatura del agua de 40 grados.

Si solo se utilizan programas de lavado con temperaturas bajas y detergentes sin lejía, se puede formar una biopelícula en la lavadora. Por ello, las bacterias y los hongos proliferan con mayor facilidad en esta superficie. Estos microorganismos no suelen causar problemas de salud, sin embargo, pueden provocar mal olor en la ropa recién lavada y en la propia lavadora. Por lo tanto, el plan de higiene para tu hogar debe incluir un ciclo de lavado semanal a una temperatura de al menos 60 grados.

AIREAR CON FRECUENCIA

El aire que se concentra en una habitación, también influye en la higiene general de tu casa, de modo que se recomienda abrir las ventanas varias veces al día para renovar el aire. La ventilación también reduce la humedad y, por lo tanto, el riesgo de crecimiento de moho. Esto es particularmente importante en las habitaciones donde puede haber mucha humedad, como el baño y la cocina. El Ministerio Federal de Medio Ambiente alemán (UBA) recomienda mantener todas las puertas interiores abiertas cuando se ventila para mejorar el intercambio de aire. Sin embargo, si la humedad del aire es alta, es aconsejable cerrar la puerta de la habitación para la ventilación para evitar que la humedad se extienda por todo el hogar.